10.9.09
*Me di cuenta de que hacer bien las cosas es una especie de orgullo, un ramito de alegría que le regalamos a nuestra capacidad. “A mi no me sale” o “Yo no sirvo para hacer esto”, eran dos frases muy comunes en ella. Y aprender a decir:
-Cuando uno pone empeño en hacer algo, le sale. Y todos servimos para hacer las cosas que hay que hacer en la vida, salvo las que están reservadas a los artistas y a los virtuosos, como las de la creación. Cuando tengo un montón de cosas que hacer, me hago una lista con ellas y pongo en primer lugar las que menos me gustan: mientras las hago no me distraigo, pongo atención y cuidado: tienen que salirme bien, porque si no me salen bien, debo repetirlas… ¡hacer dos veces algo que no me gusta! Es intolerable.
Por hoy, no encontré nada mejor que describa como me siento, como estoy. Es perfecto y tal cual a lo que me pasa. Confianza. LLegan estas épocas y me pongo intratable conmigo misma. ¡Un respiro por favor!
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